SAFETINPACK – Investigación sobre compuestos organoestánnicos en envases

El control de calidad en los materiales plásticos destinados a entrar en contacto con los alimentos es esencial para conservar intactas las propiedades organolépticas, a la par que es imprescindible obtener el máximo provecho de estos materiales de alto valor añadido por sus múltiples aplicaciones.

 

Según la legislación, el material plástico debe ser seguro y cumplir con las exigencias establecidas en las condiciones de uso previstas. Dentro de este contexto, AIJU está llevando a cabo el proyecto SAFETINPACK – “Investigación de sistemas analíticos acoplados para la mejora del análisis de los compuestos organoestánnicos en envases alimentarios, cosméticos y farmacéuticos”, cuyo objetivo es el desarrollo de un procedimiento válido para el análisis de compuestos organoestánnicos, además de una metodología de evaluación de los posibles riesgos toxicológicos que puede conllevar la presencia de estos compuestos para el consumidor.

 

Los compuestos organoestánnicos son unos de los compuestos organometálicos de mayor producción desde hace años en el ámbito europeo y tienen una amplia variedad de aplicaciones. Tradicionalmente, se empleaban como antiincrustantes en las pinturas de los cascos de los barcos hasta que fueron prohibidos por su toxicidad para el medio ambiente. En contraposición, dentro de la amplia variedad de esta familia de organometálicos, investigaciones más recientes han encontrado, en algunos de ellos, una herramienta para tratamientos contra el cáncer o aplicaciones en catálisis.

 

Estos compuestos tienen estructuras y propiedades químicas muy distintas entre sí, lo cual conlleva que dentro de una misma clase de compuestos existan algunos muy tóxicos y otros inocuos e incluso beneficiosos. Debido a esto, es esencial disponer de las herramientas de análisis necesarias para su identificación y, de este modo, poder evaluar la seguridad de los materiales empleados en la fabricación de objetos para el contacto con alimentos.

 

El Reglamento (UE) nº 10/2011 establece una lista de sustancias permitidas en materiales plásticos en contacto con alimentos. Dentro de esta lista es posible encontrar una serie de compuestos organoestánnicos que se emplean como aditivos, principalmente en PVC como estabilizantes térmicos y, en otros casos, como aditivos antioxidantes en plásticos como PP. Para estas sustancias, pese a que está permitido su uso, no existen metodologías de control que permitan su identificación y cuantificación. Su límite de migración específica (LME) en algunos casos es bastante bajo.

 

En AIJU a través del proyecto SAFETINPACK se pretende elaborar un procedimiento analítico validado que pueda cubrir estos compuestos para examinar su incidencia en los materiales destinados a entrar en contacto con alimentos, bajo las condiciones de uso esperadas. Al mismo tiempo, se analizará la posible presencia de otros compuestos organoestánnicos no indicados en la legislación. Como consecuencia de su presencia, será necesaria la realización de la pertinente evaluación de riesgo toxicológico.

 

Esta iniciativa tiene una duración de 18 meses y está financiado por IVACE, Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial de la Generalitat Valenciana, con la cofinanciación de los fondos FEDER de la UE, dentro del Programa Operativo FEDER de la Comunitat Valenciana 2014-2020.

Más info: Favio Garcia – quimicos@aiju.es